Día 3: King’s Cross, Baker Street, Oxford Street y musical en el West End

Como ya habéis leído, el tercer día de nuestra ruta de 9 días en Londres y alrededores fuimos a maravillarnos con la magia de los estudios de Harry Potter en Leavesden, una visita que empezamos a primera hora de la mañana. A las 15h, volvíamos a estar en la estación de London Euston, con varias horas por delante antes de otra experiencia fabulosa que os contaremos al final de la entrada: ¡ver el musical de Los Miserables en el Queen’s Theatre, en pleno West End londinense!
The British Library
Aprovechamos que el tren desde los estudios de Harry Potter llega a London Euston para explorar un poco esta zona al norte de Londres, en las que se encuentra la Biblioteca Británica y las estaciones de Saint Pancras y King’s Cross.
Saliendo de Euston y antes de llegar a Saint Pancras se encuentra la Biblioteca Británica (The British Library). Además de ser una biblioteca, también alberga una exhibición permanente de los tesoros de la biblioteca: primeras ediciones y obras originales de Shakespeare, partituras de Handel, la Bíblia de Gutenberg, cuadernos anotados de Jane Austen, la letra manuscrita de «Ticket to Ride» de los Beatles, mapamundis de todas las épocas… En cierto modo, nos recordó a la biblioteca Chester Beatty de Dublín, otro museo de libros que nos encantó. Si sois bibliófilos, tenéis que dedicarle por lo menos una hora a esta visita.
La entrada a la galería de tesoros es gratuita. La Biblioteca Británica también acoge otras exposiciones temporales, que son de pago.
Saint Pancras y King’s Cross
A apenas unos metros de la Biblioteca Británica ya podemos ver la estación de Saint Pancras, un edificio singular de ladrillos rojos de la época victoriana. La fachada y el campanario fueron usados en las películas de Harry Potter como si fueran el exterior de la vecina (pero menos llamativa arquitectónicamente) estación King’s Cross, donde se encuentra el famoso andén 9 y 3/4 desde donde sale el Expreso de Hogwarts.
Nuestra siguiente parada nos lleva a ver esta última estación, cuyo interior no tiene nada que ver con lo que nos muestran las películas: se trata de una estación de lo más moderna. De Harry Potter, apenas encontramos un carrito medio metido en la pared donde uno puede hacerse la típica foto y donde este mes de agosto había colas infinitas. ¡Menos mal que nosotros ya tenemos nuestra foto de los estudios!
Justo al lado de este photocall permanente, está la tienda oficial de Harry Potter: también llena de gente hasta los topes. Enfrente de la estación en verano hay un pequeño mercado de productos gastronómicos. Nos compramos dos samosas (¡riquísimas!) como tentempié de media tarde y seguimos con nuestro itinerario.
Tras los pasos de Sherlock Holmes: Baker Street
Cogemos el metro en la misma estación de Saint Pancras – King’s Cross en dirección a Baker Street. Lo de hoy va de sagas de libros y películas (y series), pues venimos a Baker Street en busca del número 221B, domicilio de Sherlock Holmes en las historias del detective de Arthur Conan Doyle. Nada más salir de la estación, uno se encuentra de frente con la estatua del inconfundible maestro de la deducción.
En verdad, 221B Baker Street era una dirección ficticia, pues en la época victoriana en la que se publicaron las novelas, la numeración de las casas en Baker Street ni tan solo llegaba al 221. En 1990, el número le fue asignado honoríficamente al Museo de Sherlock Holmes que es realmente el 239.
La fachada, de estilo georgiano, recuerda a la que se usó para las escenas del exterior del edificio donde vive el Sherlock de la exitosa serie de la BBC. Sin embargo, la localización del rodaje se encuentra en el 187 de North Gower Street (cerquita de la estación de Euston).
Oxford Street
Desde Baker Street nos vamos andando calle abajo hasta que llegamos a Oxford Street, una de las calles comerciales más transitadas de Londres. De la lujosa Selfridges a un gigantesco Primark (y otro más pequeño donde solo venden merchandising de Harry Potter), la calle está repleta de tiendas de moda.
Les Misérables: ¡una experiencia musical inolvidable!
Llegados a la parada de metro de Oxford Circus, vemos que el tiempo se nos está echando encima si queremos comer antes de ir a ver el musical. Así que, sin pensarlo dos veces, pagamos nuestros tickets con la Oyster Card (todo sobre cómo conseguir esta tarjeta de transporte en nuestra primera entrada de Londres) y nos vamos hasta la parada de Picadilly Circus.
Las entradas las recogimos ayer en Queen’s Theatre, pero no os contamos cómo las conseguimos. Hay dos opciones posibles:
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- Precio normal de la entrada: para los que, como yo, tenéis clarísimo qué musical queréis ver sí o sí (ya quise ir a ver Los Miserables en Broadway en mi Navidad en Nueva York en 2013 y tuve la mala pata de que el musical estaba de gira por Estados Unidos). Los mejores precios casi siempre los encontraréis en la web oficial de los teatros. Después de buscar y rebuscar encontramos otras páginas con precios más infímamente más baratos, aunque luego añadiendo los gastos de gestión se quedaban prácticamente igual. En el caso de Los Miserables, compramos las entradas en la página oficial. Los precios variaban entre 30£ las más baratas, con visibilidad algo reducida, a 100£, las más caras en platea. Nosotros compramos entradas a poco menos de 40£ a un lado en la primera planta. El ángulo quizás no era el mejor para ver todo el escenario, pero apenas nos perdimos 5 minutos de acción en el lado derecho del escenario. Lo mejor de estos asientos fue que, a pesar del ángulo, estábamos lo suficientemente cerca para ver la expresión en la cara de los actores en el escenario y, eso, para nosotros fue una pasada. Para elegir un buen asiento os recomendamos que consultéis Theatre Monkey. La presentación de la página es muy cutre, pero tiene información muy valiosa sobre los diferentes tipos de asientos y la visibilidad desde ellos, con fotos y comentarios de personas que han estado precisamente en esas butacas.
- Entradas súper rebajadas: si os da un poco igual qué musical ver, lo mejor es que acudáis a la oficina de TKTS en Leicester Square, donde se pueden comprar entradas para el mismo día y hasta con dos días de antelación ¡a mitad de precio! Abre de lunes a sábado de las 10h a las 17h y los domingos de 11h a 16h30. Se suelen formar colas desde la mañana, especialmente en verano y en períodos de vacaciones. Económicamente, es una opción óptima; la desventaja es que está sujeta a la disponibilidad de asientos para cada teatro y función. No es seguro que vayáis a encontrar el show ni que podáis sentaros donde preferís. O sí, podéis ser afortunados y pagar la mitad por exactamente lo que queríais.
Las entradas solo se pueden comprar en persona. Se puede consultar la web con antelación para saber qué tienen disponible, pero hay que personarse para realizar la compra (y esperar que nadie se nos haya adelantado).
La experiencia de ver Los Miserables después de casi cuatro años de anticipación fue absolutamente impresionante y cumplió con todas las expectativas que me había hecho. Una puesta en escena de 10, los vozarrones de los actores (un Valjean que ponía los pelos de punta), la gracia del niño Gavroche, un vestuario espectacular y un ritmo frenético de canciones que alternaban el drama de Los Miserables con las escenas cómicas de los Thénardier, pícaros taberneros y ladrones de la novela de Victor Hugo. En resumen, todos los ingredientes necesarios para vivir una experiencia musical que siempre recordaremos con emoción y mucho cariño.
Dónde cenar
Muchos restaurantes alrededor del West End y sobre todo en el Soho ofrecen menús especiales pre- y post-shows, asegurando a los comensales que el servicio habrá terminado antes del comienzo de la función o que les servirán cuando ésta termine (suelen ser las 22h pasadas cuando se sale del teatro). Nosotros no tuvimos mucho tiempo para explorar alguna de estas opciones y como queríamos comer antes nos tiramos a la comida rápida y nos decantamos por comer en el Five Guys, muy cerquita de Picadilly Circus. Se trata de una cadena de hamburgueserías estadounidense con un menú muy sencillo pero, aunque sus hamburguesas hayan sido laureadas como las mejores de Estados Unidos y que no tengan punto de comparación con las de otras cadenas como McDonald’s o Burger King, siguen siendo una bomba de grasa. Por no hablar de las patatas. Por el lado bueno para nuestro colesterol, hoy hemos andado sin parar, así que está todo compensado.
Otra opción que me enteré luego de que existía también en Londres (y además muy cerquita de los teatros) es el Shake Shack, la cadena de hamburguesas que más me gustaba en Estados Unidos.
En resumen:
Ruta de 9 días en Londres y alrededores
Viajes seguros:
¡Importante! Hasta el 31 de diciembre de 2020 estáis cubiertos con la tarjeta sanitaria europea en Reino Unido. Sin embargo, si no sois ciudadanos comunitarios o en cualquier caso a partir de 2021, seria recomendable visitar el país protegidos. Nosotros siempre usamos los seguros de Mondo. A través de nuestro enlace obtenéis un pequeño descuento y nos ayudáis a mantener el blog activo. ¡Gracias!
uff que buena pinta esas hamburguesas!!
hahaha, sí! Se merecen un buen paseo por Londres pre y post ingesta!
No lo dudo! Lo que muestras es de película!